lencería de lujo y yate

Hay posados y posados. Hay influencers e influencers. No es lo mismo posar en el portal de tu casa con la ropa todavía con las etiquetas porque luego lo vas a devolver a la tienda que posar en un yate en un lugar idílico con tu propia ropa de lujo. Georgina Rodríguez eclipsa a toda esa legión de ‘quiero y no puedo’ y deja claro que ella, quiera o no, puede. Sabe posar con vestidos de alta costura, como nos demostró en el pasado festival de cine de Cannes, y sabe posar con ropa deportiva. Pero también cómo debe colocarse y mirar a la cámara cuando posa con prendas más sugerentes, como los bikinis y bañadores y, sobre todo, con prendas de lencería de lujo. Las fotos no han dejado indiferente a nadie y hasta Cristina Pedroche las ha comentado con los emoticonos de fuego.  

Ahora se ha fotografiado en el yate que tienen, el Azimut Grande 27, con el que han fondeado este verano durante los días de vacaciones familiares que pasaron en aguas de Pollença, en Mallorca. Fue cuando acabó la temporada de fútbol y Ronaldo pudo cambiar las botas de tacos por el bañador. El yate es la mejor solución para los millonarios que quieren disfrutar del mar lejos de las miradas de la gente y los paparazzi. Michael Jordan, Rafa Nadal y Giorgio Armani tienen sus propios yates pero Ronaldo los alquilaba, hasta ahora. En 2020 decidió comprarse uno, un capricho por el que pagó 6 millones de euros. 

Georgina, que cumplió 27 años en enero de 2021, no tiene público al que mostrar sus últimas compras y por eso se hace selfis para enseñar los looks del verano. Lencería de firmas exclusivas, bañadores y bikinis espectaculares, vertiginosos zapatos de tacón de aguja y bolsos de Louis Vuitton. “Se te ve poderosa”, dice una de sus seguidoras en su muro de Instagram. Este verano ha apostado por las prendas sencillas. Un top negro para llevar con falda de estampado de cebra, un bañador rosa, un bikini negro… Pero, a la hora de posar y fotografiarse, cuida hasta el último detalle: las joyas, sencillas pero maravillosas, la manicura perfecta y los complementos adecuados, como el pañuelo para proteger el cabello del sol. 

La aragonesa es una de las mujeres más conocidas por su afición a compartir algunos detalles de su vida en Instagram pero a la vez es una incógnita para el gran público. Por eso, quizá, despierta tanto interés y sus movimientos se analizan tanto en la calle como en las redacciones de la prensa especializada. Pero sería injusto hablar solo de su imagen y no valorar su lado solidario. Georgina siempre que puede echa una mano a los menos favorecidos, colaborando con distintas ONG y con el Rastrillo solidario.